El mosaico de interior blanco debe ser rico en detalles. Nos enseña la física que el blanco es la ausencia de colores. Pero eso es en el laboratorio. Difícilmente en la realidad se den las condiciones ideales para que la naturaleza nos regale un blanco puro. Siempre hay matices.
Es como la lengua de los esquimales, que reserva docenas de palabras para lo que para nosotros es “hielo” y “nieve”. Pero ellos viven allí y distinguen unas gradaciones que para nosotros pasan desapercibidas y eso se refleja en su idioma.
Del mismo modo, la Serie Antártica de arts se basa en el blanco, pero con numerosos matices logrados gracias a las técnicas de Injeckt desarrolladas por la empresa. Éstas permiten reproducir con la mayor fidelidad lo que en la naturaleza nos encontramos. Piedra con un blanco más o menos intenso, los veteados del mármol y un largo etcétera al que solo la imaginación pone límite.
Ambientes con mosaico de interior
Elegancia, limpieza, seguridad. Esto es lo que nos transmite la Serie Antártica. Es una opción ideal para su aplicación como mosaico de interior. Sobre todo, en lugares donde la higiene y el bienestar de las personas son importantes. La cocina y el baño, por poner ejemplos claros.
La serie Antártica ofrece seis modelos diferentes. Sus formatos son de 25×25 cm con teselas cuadradas o de 35×35 con teselas hexagonales estilo honey. Combinados entre sí o con la aplicación de solo una de las variedades, una vez colocado ofrece una imagen limpia y rotunda rica en matices y, desde luego, nada aburrida ni monótona.
Naturaleza en el hogar
Con la Serie Antártica arts ha conseguido, una vez más, que la naturaleza se traslade a nuestro hogar para hacernos la vida más agradable. Nos da la tranquilidad de contar con un material que garantiza la limpieza, las mejores condiciones higiénicas y fabricado con el máximo respeto al Environnement. Hay que recordar que el 99% de los materiales que emplea Vidrepur en sus procesos son reciclados.
Define tu ambiente con los matices del blanco que pone a tu alcance la serie Antártica de Vidrepur. Un mosaico de interior ideal